Desde la izquierda ; México seguirá marchando
El famoso Plan B ha dado para argumentar y contra argumentar todo tipo de visiones en la que ni unos ni otros nos hablan con toda la verdad sobre la reforma electoral orillándonos a un debate sesgado que polariza y coopta adeptos para cualquiera de los extremos.
La marcha del pasado domingo fue importante sin duda alguna, no fue tampoco como han dicho la concentración más numerosa de los últimos tiempos realizada fuera del oficialismo, fue más numerosa la de los electricistas o la de los jóvenes de Ayotzinapan, sin embargo no deja de ser un ejercicio trascendente de protesta civilizada, un gran éxito que llenó muchos zócalos y que manda un mensaje de reagrupamiento a través de la sociedad civil Vs pueblo.
Pero para que sea un éxito total falta un ejercicio de autocrítica de la oposición; es de reconocerse la astucia que tuvieron los partidos políticos al aprovecharse de un tema poco comprendido por la sociedad, montándose además en ella para tener una convocatoria copiosa, sin embrago la exitosa retórica de que el INE se está desmantelando o están en riesgo las elecciones fue exagerada, tramposa y una provocación, no hay tal cosa, por ejemplo la reconfiguración de estructuras del INE no atenta contra su funcionalidad, si bien es cierto va en contra de la alta burocracia también lo es que se garantiza el sistema operativo o los mecanismos para que siga actuando con normalidad.
El tema de fondo es cómo potencializar el éxito alcanzado ese domingo, el movimiento que arropa la coalición PAN, PRI, PRD le resulta complejo mover y activar a la militancia y a simpatizantes, o peor aún cómo entusiasmar a ciudadanos cuando no tienen un candidato, no solo con la suficiente imagen, sino con un proyecto alternativo que dé soporte a un personaje con visión de estadista capaz de asumir los grandes retos de una Nación dividida, confrontada y vapuleada por diferentes crisis.
El tema de los convocantes es otra arista, no hay calidad política en muchos de ellos para encabezar semejante cruzada democrática, le dan la razón a López Obrador cuando salen personajes de lo más rancio de la política ochentera como Roberto Madrazo, Ulises Ruiz o Elba Esther; Vicente Fox, Calderon o su esposa a pocos días de lo de García Luna; o Claudio X González en representación de esos empresarios que ocuparon atajos para amasar fortunas o Pages representando a los intelectuales orgánicos que cobraban por sus editoriales en el gobierno; fue como si se hubieran detenido en el tiempo donde no hay jóvenes con capacidad de convocatoria dando cabida a la narrativa Lopezobradorista de que les urge regresar al sistema de privilegios en el que operaban.
Hubo un tiempo en el que el cambio democrático del país tuvo el apoyo de nuevas generaciones que se hartaron de un sistema al que se le denominó la dictadura perfecta, el sueño duró 18 años y el hartazgo se profundizó, esas nuevas generaciones buscaron otra salida, hoy se encuentran en la disyuntiva de regresar a ese pasado que los defraudó o apostar por una ruta que tampoco garantiza un futuro promisorio. La discusión no es si pudieron llenar o no el zócalo, está en que a la oposición le sigue faltando algo, o no está haciendo algo bien para que realmente influya en el grueso de la población. La marcha abona al sistema de libertades y de paz social, con eso gana México y ganamos todos, por ello resultará igual de importante que de un lado o del otro sigamos siempre marchando.
Ulises Gómez de la Rosa
Presidente Estatal de Acción Sí AC
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