Orientación Familiar 

Por “Clarita” Pasos

Sobre investigaciones llevadas a cabo en Estados Unidos. Otras investigaciones parecidas se han realizado en Estados Unidos a continuación se resumen las conclusiones derivadas de estas investigaciones.

El consumo infantil de televisión aumenta progresivamente, de los 3 a los 14 años y disminuye, gradualmente, de los 15 a los 18.

La afición por la televisión en los hijos esta en función del modo en que se comportan, frente a este medio, sus padres.

Cuando más jóvenes son los Padres más televisión permiten ver a sus hijos. La edad de la madre es más decisiva que la del adre en lo relativo a la conclusión anterior.

El tiempo que los hijos destinan a la televisión no se relaciona con el nivel socioeconómico de los padres (evaluado este según los  ingresos familiares).  En la medida en que la estimación del tiempo dedicado a la televisión, realizada por los padres, coinciden con el tiempo dedicado, a los padres seleccionan los programas y los hijos controlan más mejor su comportamiento televisivo.

En realidad ayudando a los hijos a que seleccionen en algunos programas favoritos, para que no se la pasen toda la tarde frente al televisor, es conveniente que se haga cumplir, esta selección pues cualquier motivo los padres pueden ceder.

Los programas deben ser seleccionados por todos los miembros de la familia quizá la mayoría de los miembros coincida en algunos iguales y entonces esto posiblemente ayude a que se reduzca el tiempo de estar frente a la pantalla.

Hay muchos géneros muy recreativos para los miembros de la familia, como pueden ser, deportivas, informativos, obras de teatro, etc.

Es muy recomendable que la televisión no se prenda en el horario de las comidas, pues esta aísla la comunicación entre los miembros de la familia. Hay que cuidar mucho este aspecto.

A veces es difícil pues se cree que la televisión une a la familia, pero en este caso la aísla.

Muchas gracias continuaremos la próxima semana.