Tras un recorrido ofrecido a medios de comunicación, el Jefe del Departamento de Juzgados Cívicos de la capital, Héctor Miguel Hernández Velázquez, puntualizó la efectividad y los resultados del Programa de Alcoholímetro; así como del Centro Municipal de Infracciones por Alcoholimetría, conocido como el “Torito” y la “Vaquita”.
En este sentido, el funcionario reveló que registran de tres a cuatro amparos dirigidos en contra de este organismo, donde ciudadanos que cayeron en las pruebas de niveles de alcohol utilizan este recurso jurídico para evitar el arresto inconmutable.
Sin embargo, Héctor Hernández aseguró que ningún recurso ha beneficiado al ciudadano; sino que se acredita una “detención legal”, ante la conducta del quejoso de haber manejado en estado inconveniente.
“Al mes llegan tres a cuatro amparos, en los que solicitan la liberación, de lo que se quejan es de eso. Se concede la suspensión a efecto de que se pueda liberar a las personas; después, el juzgado de distrito determina que la detención fue legal, y las personas tienen que regresar a cumplir con sus horas de sanción”.
Apuntó que, en lo que va de esta administración, alrededor de mil 302 personas han pasado hasta 24 horas en el Centro de Infracciones, por rebasar por mucho los niveles permitidos de alcohol en la sangre; y 549 han pagado multas que llegan hasta los 18 mil pesos.
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